Que poco inspirado me encuentro estos días, el trabajo solo me hace pensar en números y cuentas, y facturas, y programas y mas facturas y pagos, y teléfonos cortados, y más pagos y lo más triste, que ni siquiera soy contable, pero me ha tocado, será eso que se dice por ahí de “anda, te ha tocado la china” pues a mí me ha tocado entera, la china, pero entera, con todos sus habitantes vaya agobio.
Un fin de semana, de los corrientes, de esos que no pasarán a la historia, no a la historia en mayúsculas, sino a la historia esa que vamos escribiendo cada uno poco a poco. Ojalá pasara algo más allá de lo normal, la cerveza no estuviese fría, o el café no fuese amargo, o la leche no estuviese semidesnatada o el tío bueno de mi vecino del final del pasillo me comiera la boca al salir del ascensor, o la vecina me insultara por mirar el culo rico de su marido, o en el bar no supieran lo que tomo para desayunar, o tú me hubieses enviado un mensaje diciendo que querías algo de sexo conmigo. Pero no, nada de eso ha pasado, ha vuelvo a ser un fin de semana despreocupado.
La cerveza estaba bien fría, el café amargo y la leche semidesnatada de mercadona, el tío bueno de mi vecino le comía la boca a su mujer al salir del ascensor, y mi vecina ni se fijó en mí mientras yo miraba el culo de su marido, en el bar siempre me ponen café con leche templado y media de aceite jamón para desayunar sin que yo lo pida, y tú no me has enviado ningún mensaje y nunca te atreviste a tener sexo conmigo. Un fin de semana despreocupado.
La gripe aviar sigue matando pájaros, aunque parece ser que pájaros animales, no pajarracos de esos que todos conocemos. El tiempo ha mejorado, explotaron de azahar los naranjos, los niñatos se han puesto marcando pecho, brazos y paquete, todo ya va más ajustado, vaya primavera que nos espera de erecciones y empalmes de paseo, difícil de tragar tanta carne rica y uno a dieta de verduras, y todo, por lucir luego palmito en verano, jajaja, me río porque palmito a mis cuarenta y tantos ya es difícil de lucir, pero este puto complejo Peter Pan que nos han inculcado que no se va, y nos hace la vida mucho, mucho, mucho, mas difícil.
Ahora de gym, y que le vamos a hacer, si tanta silla y la edad me han provocado en mi una barriga que provoca dolores de cintura, espalda y demás, pues por salud a quitarla, y si encima me pongo más (porque ya lo estoy, jejejeej) buenorro, pues mejor, ya que estamos en la era del hombre de plástico como diría mi poeta Mr. Replan. Pues a seguir la corriente, y a vestirse de chanel 4 las tardes de siesta y zozobra, y pasar de tomates que ya están demasiado espachurrados. El 23 el cumpleaños de Carmen y se me pasó, que cafre y que mala memoria tengo, pero ya lo decía antes que no tengo inspiración que se me ha ido de golpe a comprar el carrefour y se ha quedado en la sección de congelados, a ver si vuelve, la palabra más tuya, es el regalo para ella, aunque antes me lo he grabado, una jodida costumbre, jajajja, pero nunca espero a que lo habrán, la gente me dice que está feo, pero yo creo que no, como va a estar feo el regalo aun amig@ eso es imposible, el regalo a alguien que quieres nunca, nunca puede estar ni ser feo.
Bueno, perdona este rato de coñazo, y espero estar mas inspirado mañana, quiero escribir, escribir algo tan bonito que no me guste publicarlo, jeejej, mientras tanto conformate con estas palabras tontas y desganadas, pero mías al fin y al cabo.
Jose Salvador
