
Vaya década nos esta tocando vivir, creíamos que el siglo pasado lo había dado todo, las guerras europeas, las dictaduras, el fascismo, el nazismo, guerras étnicas y religiosas, las debacles económicas, las construcción de muros fronterizos… nos esperábamos ya una época de tranquilidad, de dialogo entre culturas, entre pueblos, habíamos empezado el nuevo siglo con el temor al efecto 2000 que parecía que todo se iba a ir el garete por culpa de un fallo programático en los ordenadores que comenzaban a manejar el mundo, nuestro mundo, nuestras vidas, pero después del gran susto, no ocurrió nada y la década comenzó con más esperanzas de futuro que de otra cosa.
Los fascismos, excepto algunas dictaduras, estaban vencidos, el nazismo no tenia fuerza real para renacer, los muros estaban cayendo a marchas agigantadas aunque algunos querían construir otros, las guerras étnicas y religiosas estaban siendo juzgadas y condenadas, y la prosperidad económica empezaba a ser la realidad de occidente y de América del norte y algunos emergentes como China, Brasil, ….. nos quedaba todavía la asignatura pendiente del hambre en África, pero se habían puesto los objetivos de acabar con ella en estas dos décadas venideras, las vacunas para paliar la mortandad africana estaban casi resueltas y para empezar a aplicarla.
La salud era cada vez más longeva, íbamos quitándole fuerza al cáncer para que no matara tanto, el VIH lo convertíamos en una enfermedad crónica y los avances para una vacuna iban por buen camino. Se estaba construyendo un estado del bienestar acorde con la gente que vivíamos desde un sistema democrático y participativo. Por lo menos eso criamos, porque de pronto y cuando la década estaba acabando, cuando ya quedaban pocos años para decir adiós a una de las partes mas prosperas de la humanidad, el dinero, el capital, trunco nuestras vidas, nos mando de nuevo a la mas oscura de nuestras pesadillas, hizo añicos lo construido durante siglos.
Ha destrozado nuestro sistema de salud, sin dinero para investigar, parando procesos de mejora para encontrar vacunas a enfermedades que siguen matando o terapias positivas y menos invasivas para la cura del cáncer, del Alzheimer, parkinson, …. Los procesos sociales para la igualdad de oportunidades entre la población mas desfavorecida dejan de existir, la ayuda pública para la creación de bienestar en las comunicaciones, el empleo, la vivienda, dejan de ser prioritarias y no aparecen en los presupuestos del estado.
Las personas dejan de ser prioridad para el sistema y pasa a ser prioritaria la deuda que se tiene, el dinero que se presta, el dinero que se compra,… ya no somos el primer eslabón de la cadena pasamos a formar parte del prescindible, ahora la humanidad somos demasiados, ya no es importante acabar con el hambre, ni mejorar los sistemas de salud, ni las vacunas, ni las mejoras sociales en comunicaciones, vivienda, empleo, ahora lo único por lo que los grandes mandatarios del mundo se reúnen, es por el dinero, por la famosa DEUDA SOBERANA.
Ante todo ello, teniendo cifras de paro por países insoportable para la sociedad, con el descontento de la ciudadanía por la pérdida de derechos, aparecen movimientos más o menos espontáneos que ponen en cuestión el sistema. Queda en duda cual es el sistema que se plantea como alternativa, ya que este tipo de movimientos si plantean cuestiones concretas a poner en marcha, en algunas problemáticas, pero no como ni quien las pondría, pues rechazan a los partidos políticos, sindicatos y cualquier tipo de forma organizativa que pueda provenir del pasado, ya que se les hace cómplices de la situación que se esta viviendo. Preguntas de cómo destruir los mercados que nos arruinan, de cómo pagar los gastos sociales sino tenemos dinero, o como mantener un sistema de salud que cada vez tiene menos afiliados cotizantes, no se responden desde este tipo de nuevas formas de organizarse o entender la participación. Son positivos hasta la fecha en su respuesta social a lo que ocurre, pero no se termina de ver su implicación en la solución a la realidad impuesta por el dinero, el mercado, el capital. Mientras, la derecha política que representa a: el dinero, el mercado y el capital, avanza en toda Europa en poder, dentro de las instituciones que nos gobiernan.
Un atisbo de esperanza, para comenzar la nueva década que acabamos de estrenar, por lo menos en nuestro país. El terrorismo de ETA ha dado por finalizada su lucha armada, esto provocará una nueva forma política de pensar como gestionar este proceso, pues en la antigua Yugoslavia, en Irlanda, en Italia, en Alemania, donde se han vivido procesos de terrorismo mas o menos grave, y en el caso de Alemania el de provocar una guerra mundial, se han solucionado más o menos aceptablemente, seguramente con mucho dolor por parte de aquellos y aquellas que sufrieron el azote de esas injusticias y sinrazones, pero o gestionamos los nuevos procesos o estaremos eternamente condenados a vivir y repetir conflictos que podían haber sido superados.
A nivel internacional, también se abre una década nueva con la caída de regímenes dictatoriales en el mundo Árabe, algo impensable hace tan solo unos años, la muerte de Gadafi, líder que hace muy poco tiempo era recibido con honores por todos los lideres democráticos del mundo, abre nuevas perspectivas de libertad y avances democráticos en el mundo, esperemos que sea una nueva época donde sean los pueblos los que van decidiendo su futuro, o por lo menos la forma de ser gobernados.
Seguramente no podemos malgastar nuestros recursos pues son limitados, pero no nos engañemos, la solución no puede estar a costa de abandonar nuestros avances en salud o bienestar social general, quizás no podamos seguir investigando otros planetas, o tener motos y coches mas avanzados para correr en carreras, o tendremos que dejar para mejor momento y circunstancias el miedo al otro y no invertir en armas de guerra, en escudos antimisiles, tendremos que fiarnos del vecino y hacernos amigos, pues los amigos no suelen pelearse a muerte.
Hemos de cambiar las normas y las formas, todo aquello que ha provocado que estemos peor que hace una década quitarlo, pero no destrocemos lo que hemos construido como avance Humano de esta sociedad, demasiados muertos han quedado en el camino, si las cifras del paro son alarmantes, la de los muertos son escalofriantes.
Para esta tarea de construir nuevas normas y formas, tú también eres importante, lo creas o no. Utiliza tu poder para cambiar las cosas.
Jose Salvador
22 de octubre de 2010