BUSCANDO BESOS ENCONTRE HUMEDAD

Este espacio lo utilizo para escribir lo que me apetece, a veces, tiene que ver conmigo y otras con lo vivido sin ser el protagonista, pero siempre estoy de acuerdo con reflexionar sobre lo escrito.

al otro lado del teclado estoy yo y quien me lee, ojalá algún dia la humedad solo sea de los besos que me das.

viernes, abril 29, 2016

De nuevo en pelotas ......








¿Y ahora que hacemos? De nuevo desnudos, en pelotas, en tetotas, sin nada que tapar, ni destapar, nos dicen, que lo que decidido aquel 20 de diciembre del año pasado no les sirve, que no les convence, que no soluciona nada, y nos piden que volvamos a elegir.

¿elegir? O más bien, decidir lo que ellos y ellas desean, quieren o tienen establecido, porque elegir, ya elegimos, votamos hace tan solo unos meses para delegar durante 4 años (toda una legislatura) a nuestros y nuestras representantes, aquellas mujeres y hombres, que legislarán nuevas normas o derogarán las existentes, que pondrán en marcha un nuevo proyecto donde la transparencia, la igualdad, la justicia social sean los ejes de la nueva política, con la exigencia de una participación más activa de la ciudadanía.

Otros y otras decidieron que había que mejorar pero a través de los mismos procesos y de las mismas personas y por lo tanto políticas, otros y otras eligieron más estabilidad y proclamaron representantes a aquellas mujeres y hombres que tenían más experiencia aunque ideológicamente fuesen más confusos.

En fin, que ELEGIR ya hemos elegido, con nuestros criterios y con la fuerza que nos da decidir con nuestro voto quien compone cada uno de los 350 asientos del Congreso de los Diputados del Estado Español.

Partidos antiguos con largos años de existencia, otros con menos pero también pertenecientes al “establishment”. Partidos que representan a espacios o territorios específicos del Estado, desde nacionalismos a mareas, o espacios en común. Partidos nuevos, que han crecido al albor de las nuevas generaciones e intentando recoger la presión y sentir de la calle, otros nuevos en formas y juventud pero viejo en ideas e ideologías, en definitiva, un Parlamento tan variado como la tertulia de cualquier bar de barrio.

Ahora les tocaba a ellos y ellas interpretar cada uno de los cambios, cada una de las decisiones, claro que no podía ser todo de un lado ni del otro, claro que la pluralidad les llevaba a estar permanentemente negociando, claro que es complicado, por eso elegimos, que ningún partido tuviese la fuerza suficiente por si solo, de hacer y deshacer, lo que le de la gana, que los tiempos del caudillismo, donde costaba diferenciar cada uno de los poderes del Estado, habían acabado, eran otros tiempos, son otros tiempos, no se si mejores o peores, pero lo que si tengo claro es que son diferentes.

Nos devuelven los votos, nos los lanzan a la cara y nos dicen: ciudadanos y ciudadanas estos votos no nos sirven para nada, no posibilitan estabilidad, no nos adjudican políticas de cambio, no nos permiten mejorar el estado del bienestar, nos condicionan a no llegar a acuerdos, son votos inútiles, que no sirven, que nos alejan de lo que queremos y de lo que estamos dispuestos a dar.

Cuando tenían mayorías absolutas, llamaban estabilidad a lo que nosotros llamaríamos “no me toques el sillón” quiero todo el poder, lo que ellos llamaban políticas para el cambio es lo que hace que perpetúen su poder y repartan “migajas de bienestar” y los hace más fuertes ante la ciudadanía, lo que ellos llaman Estado del Bienestar solo políticas de subsistencia, de dependencia de beneficencia.

Por eso nos devuelven los votos, por eso no les valemos, por eso no se sienten representados por sus votantes, por eso hoy se van de rositas tirándonos nuestros votos a la cara.

Otra vez de nuevo en pelotas, desnudos, sin nada que anticipe un buen abrigo, de nuevo, sin quererlo, nos dicen que esta es la solución más democrática ¿pero no nos preguntan si queremos bajar nuestras pensiones, o privatizar nuestra sanidad, comprar nuestra propia deuda con el dinero de nuestros ahorros, o privatizar los servicios públicos, de eso no nos preguntan, eso quizás no sea más democrático?. Hay que estar votando hasta que les guste el resultado, de nuevo, lo nuevo ya esta rancio, ya huele a viejo.

Y desnudo y en pelotas, y desnuda y en tetotas, tendrás que volver a a votar, cabreada y cabreado, sin ganas, con el voto cogido con pinzas y las urnas marraneadas de tanto mal uso, pero tendrás, tendremos que salir a votar.

Porque esta absurda y falsa democracia necesita de un solo voto para sentirse legitimado, y ese voto puede ser el mio, o el tuyo, o el de otra, y entonces, ya no valdrán reflexiones, ni escritos en blog, ni editoriales de prensa, ya solo nos tocará humilladamente esperar cuatro largos años. O que tampoco esta vez les guste el resultado.

Yo voy a votar, con rabia, con desasosiego, con ganas de patear cada una de las urnas que encuentre en mi camino, con ganas de convertir los colegios electorales en clases de zumba, donde mover nuestro cuerpo tan anquilosado, al ritmo de la nueva música, pero mientras eso llega, seré obediente de nuevo. esta vez.

Pensaré cada uno de los gestos, de las frases y de los hechos, de esta corta y absurda legislatura, y con todo ello, y con mis ideas, y con mis reflexiones el 26 de junio volveré a salir a la calle, tan ilusionado como el pasado 20 de diciembre, creyendo, pensando, rezando, que en mi sobre, llevo el cambio, el futuro mejor que nos espera.

Ojalá la próxima vez que me dejen en pelotas, desnudo, sea porque me han invitado a una bonita cala del Cabo de Gata y las urnas son el mar mediterráneo y la papeleta mi cuerpo disfrutando del agua salada.

Jose Salvador 29 de abril 2016
Un sencillo y cabreado votante