BUSCANDO BESOS ENCONTRE HUMEDAD

Este espacio lo utilizo para escribir lo que me apetece, a veces, tiene que ver conmigo y otras con lo vivido sin ser el protagonista, pero siempre estoy de acuerdo con reflexionar sobre lo escrito.

al otro lado del teclado estoy yo y quien me lee, ojalá algún dia la humedad solo sea de los besos que me das.

lunes, enero 09, 2006

Carta de amor para ser usada

Hola, Cuánto tiempo sin hablarte, porque aunque sean letras lo que escribo, en ellas está mi sonido y mis palabras.

Prometí no dejar de recordarte y de hecho me acuerdo de ti muy a menudo, cuando llueve, porque el agua me recuerda al mar que baña tu mirada, cuando hace viento ,porque el aire me recuerda a tu cara y a tu pelo. Con el frió, por la falta de calor de tus palabras, y como no de tu cuerpo y tus miradas. El calor, me recuerda a la noche y al sudor sobre la almohada, almohada que nunca ha sido visitada, ni por tu pelo, ni por tu cara, ni siquiera por tu mirada.

Muchas cosas, muchos tiempos, muchas lunas, me recuerdan que aún estas ahí y te escribo porque me da la gana, a veces para desahogarme otras porque quiero contarte cosas que me pasan.

Estoy aquí de nuevo frente al ordenador, el maldito teclado ni siquiera me hace caso, pienso una cosa, y en letras escribe otra, no quiere que te quiera o quizás, tal vez tenga envidia de mis ojos recordando tu mirada. Que jodida que es la ciencia cuando no entiende de almas. Aunque yo tampoco sé si existen, ni siquiera si la tengo, pero de lo que sí estoy seguro es de lo que siento, pero no se ponerlo ¡joder!, en que colegio me habrán enseñado a ocultar los sentimientos, solo sé que hay palabras que no encuentro, que nadie me las enseñó y esas son las que necesito para seguir escribiendo, ¿Qué hago ahora?. Cómo voy a seguir contándote lo que hago, como voy a seguir contándote cómo paso los días, a quien conozco y a quien he conocido.

Seguro que con tus ojos, mirando a mi mirada, sería mucho más fácil encontrar esas palabras. Pero no te asustes no me he empaquetado en este sobre, no lo he hecho porque no cabía, cuando invente el sistema de trasbordo de miradas te mandaré una escondida detrás del sello para que solo la puedas ver tú y pueda yo encontrar palabras.

Hoy voy a despedirme no sin antes recordarte que las letras aunque cada vez se revuelvan más contra mí, hay dos que he conseguido retener, las tengo aquí guardadas, muy celosamente, sin que nadie se acerque, para sacarlas de vez en cuando y ponerlas en tus manos. Hoy las saco despacio y aquí las tienes de nuevo, guárdalas como yo las guardo, te acuerdas que estas son las dos palabras TE QUIERO.

JOSE SALVADOR