BUSCANDO BESOS ENCONTRE HUMEDAD

Este espacio lo utilizo para escribir lo que me apetece, a veces, tiene que ver conmigo y otras con lo vivido sin ser el protagonista, pero siempre estoy de acuerdo con reflexionar sobre lo escrito.

al otro lado del teclado estoy yo y quien me lee, ojalá algún dia la humedad solo sea de los besos que me das.

miércoles, diciembre 29, 2010

lunes, diciembre 20, 2010

ESPEJOS


Si esto fuera un resumen del año que esta acabando faltarían tan solo unas pocas palabras para expresarlo “Ostia, que difícil nos lo han puesto”, creo que la inmensa mayoría de ciudadanos y ciudadanas firmarían esta máxima como resumen de 2010. Pero no es mi intención rendir cuentas a estas alturas del año, pues para ello debería ir hacia atrás recordar lo escrito, los momentos vividos, los compartidos, y lo escrito por mi amigo Luis Yepes, que hábilmente ha ido reflejando en algunos de sus escritos el sentir abrupto del de a pie. Y quieras que no todo eso es un gran trabajo que ahora ni tengo tiempo, ni ganas, para que mentir, de realizar.

Quiero reflejar, ideas, que seguramente tienen que ver con estas fechas. Me alegra, no me siento hipócrita, que exista un momento al año, aunque sea al final del mismo, en el que nos paramos a ser un poco mas humildes, mas solidarios o corresponsables con lo que hacemos y decimos, un momento donde podamos compartir espacios con aquellos que difícilmente vemos por avatares de la vida, y no me refiero a las cenas obligadas de familia, ni a los eventos empresariales donde el obrero paga comida y el jefe controla lo que cada uno dice y piensa con dos copas de mas.

No, no me refiero a todo eso, sino al compartir de un vino, un café o un beso, con la gente que queremos y que por quererla la dejamos para el final, para cuando acaba el año, para el mensaje navideño de postal o de Facebook, o del mensaje al móvil, me refiero a esos, a los que sabemos que están ahí a pesar de todo, a los que podemos mirar dulcemente a la cara aunque sea cada seis meses o mas sin sentir vergüenza, a los que llamamos por teléfono cuando la duda de nuestras existencia nos complica el sueño, a los que utilizamos para justificar nuestras acciones o decisiones y que estas sean mas compartidas. A los que siempre están ahí, aunque a veces falten, a la lista de los inolvidables, de los que no queremos prescindir a pesar de ser muchas veces el propio espejo que nos devuelve las contradicciones que vivimos cada día.

También es tiempo de repensar, o de volver a pensar, que estilo de vida queremos disfrutar, marcarnos objetivos claros de lo que queremos alcanzar, y que desde ahí podamos desarrollar nuestro plan, solos o compartidos, pero saber hacia donde vamos.

Y digo repensar, porque seguramente, todos y todas lo hemos pensado, pero llego el euro, la riqueza, le Europa de los mercaderes, de las grandezas materiales, de la tecnología del aquí y ahora, y nos alumbró como hace mas de 500 años, hicimos nosotros con otras culturas poniéndolas frente a los espejos de lo ¿civilizado?, y recogimos su oro (¿robamos?), tanto tiempo pasado y tampoco aprendido.

Llegaron de nuevo los conquistadores y nos alumbraron con bonitos coches, viajes por el mundo, casas de sueño, vacaciones, pensiones, sanidad, justicia, libertades, mientras disfrutábamos de todos esos espejos, ensimismados, hipnotizados, encandilados, otros, los más, recogían los frutos de miseria que nosotros íbamos dejando, y eran cada vez menos los que teníamos espejos y mas los que solo tenían cobre viejo y oxidado donde no podían reflejarse.

Y comenzaron a llegar, cada vez más y con más miembros de la tribu y venían y se quedaban y compartían, se adaptaban al espejo donde nos reflejábamos.

Y los mercaderes se asustaron, salieron huyendo del templo, les daba miedo tanta cultura junta, tanto color mezclado, tantas voces cantando al mismo son, les dio miedo las tecnologías que inventaron para controlar pues también servían para controlarlos a ellos, wikileaks es un ejemplo, y de tanto miedo, corrieron mas de lo esperado, y se llevaron todo nuestro oro, y nuestra sanidad quedo mal trecha, nuestra libertad tocada, nuestras tecnologías controladas, nuestros viajes descalzos, nuestra justicia sin medios, nuestras pensiones sin fondos, se fueron con todo el oro, a otro territorio, a otras culturas donde poder conquistar y que no sean reconocidos (Brasil, China, India,..) volverán desde allí a deslumbrar con sus espejos, y seremos nosotros los que recojamos las miserias que hoy ellos están viviendo.

O empezamos a romper espejos, o quizás para cuando queramos ya no quedemos ningún INDIO. Y que no te engañen, romper un espejo no trae siete años de mala suerte, eso lo dicen, porque los espejos son solo de ellos.


Jose Salvador
Antes del espejo en forma de bola, de sorteo,
Diciembre 2010

domingo, diciembre 19, 2010

El de las mariposas













He pasado cientos de veces, quizás miles, he quedado bajo su sombra algunas de esas miles, junto al cañillo del agua ya desaparecido de su lugar habitual y de su forma diríase casi decadente, como Lisboa en un día de lluvia, pero no por ello deja de ser hermosa.

He visto transformar sus alrededores, algunas veces para bien, otras, para cometer actos tan solo explicables desde la prepotencia de quien gobierna. He visto la transformación desde la propia ciudad y otras como visitante de vuelta a la tierra que me vio nacer. He mirado hacia el cielo para ver su entrañable símbolo más de una vez.

Hoy cuando mas denostado esta el sistema bancario, se ha demostrado que ha engañado, arruinado, expropiado y expoliado a la ciudadanía después de muchos años, siglos, de trabajo y lucha para llegar al estado del bienestar donde estabamos. Digo, todo eso, porque ha sido un banco, una caja, quien ha restaurado el emblemático edificio de la Puerta de Purchena en Almería capital.

El de las mariposas, ya vuelve a formar parte de la ciudad, ahí queda para disfrutarlo, el resto, el tiempo dirá.

Jose Salvador

lunes, diciembre 13, 2010

En busca de otras estrellas





















SI YO ENCONTRARA LA ESTRELLA. ENRIQUE MORENTE

Si yo encontrara la estrella que me guiara,
yo la metería muy dentro de mi pecho y la venerara,
si encontrara la estrella que en el camino me alumbrara.

Como relámpago de fuego fuiste,
que en mi sentimiento entraste,
dejaste encendido el fuego y entre llamas me dejaste.

Estrella, llévame a un mundo con más verdades,
con menos odios, con más clemencia y más piedades.



Que en paz descanse. Maestro.

13 de diciembre de 2010.
Jose Salvador

jueves, diciembre 09, 2010

DE MADRID AL ....................



Tantas experiencias llenas de asfalto, metros y risas, prisas y pisas las calles nuevamente, merecen mas que una Cibeles, todo un baño de cuentos cortos, o de lo corto que ha sido el cuento.

Por Madrid y la gente que me ha acogido.

Jose Salvador

miércoles, diciembre 01, 2010

DIA MUNDIAL DE LA LUCHA CONTRA EL SIDA



Donde quiera que se alce la voz contra la injusticia
Donde quiera que se alce la mano contra la discriminacion
Donde quiera que se abran los ojos contra la impotencia

Alli, estará un lazo rojo recordando que cada día mueren en el mundo miles de personas de sida por falta de atención médica y farmacológica, mientras millones de dólares y euros rescatan a bancos que juegan al monopoly.

Por ti, por mi, por nosotros y nosotras, por vosotros y vosotras, HOY UN LAZO ROJO.

Jose Salvador


domingo, noviembre 21, 2010

MÁS ALLÁ DEL CIELO










Tenía la impresión que ya todo estaba resuelto, o por lo menos, en el camino de resolverse, que ya no hablaríamos mucho más de la crisis, y que nuestras vidas volverían a ser lo que eran, sin saber muy bien que es eso. Pero la cruda realidad nos dice lo contrario, seguimos dudando del que tenemos al lado, si es inmigrante no solo dudamos sino que estamos casi en la certeza que nos quita algo ¿nuestro? O que sufriremos su violencia en algún momento. La desconfianza se ha apoderado de nuestra vida, ya no nos creemos nada ni a nadie, ahora estamos solos y no sabemos muy bien porque.

Estamos en el paro y nos falta tiempo, vivimos con prisa, estamos estresados y sin embargo lo que nos sobra, lo que tenemos, lo que nos pertenece en exclusiva es el tiempo, y este por alguna determinada razón lo hemos escondido en algún lugar, o lo hemos vendido al mejor postor, o peor quizás, no sabemos porque ni como pero nos hemos hecho esclavos de él.

Miles de personas ven machacadas sus esperanzas de conseguir vivir con mayor dignidad, sus casas son retiradas por el capital que se las ofreció dejando tras de si un rastro de deudas y miseria. Miles de personas ven como lo más preciado que han tenido siempre, su fuerza de trabajo, su capacidad para trabajar es obviada por el mercado, vapuleada por el capital que se ha quedado con su casa. Miles de personas viven el día a día como una autentica agonía donde el final del camino se sigue viendo demasiado oscuro. Y nosotros los mas afortunados de momento, creemos que son cifras, que aumentan el gasto social al cobrar las prestaciones, que no cotizan para la jubilación y ponen en riesgo el sistema, que acuden a los médicos y provocan un mayor gasto farmacéutico, que no pagan impuestos. Los vemos como una carga, no como lo que son, nuestros vecinos y vecinas, nuestros amigos, nuestros familiares, en definitiva, nuestra raza, LOS HUMANOS.

Tenemos cientos de amigos en Facebook, o en el resto de perfiles, pasamos horas de nuestro día hablando por el MSN con conocidos a los que consideramos como de nuestro circulo cercano, conocemos cada uno de los rincones de su piel y de su alma, pero el sábado noche nos quedamos en casa porque no tenemos con quien salir, la última película que vimos en el cine la comentamos en nuestra face porque íbamos solos y no teníamos con quien compartir la experiencia que habíamos vivido a través de la gran pantalla. Tenemos cientos de amigos y amigas y nos sentimos realmente solos, a veces nos entran ganas de llamar al vecino para que nos abrace, quizás esta mañana acudamos a la puerta del sol donde los abrazos son gratis.

Sonreímos cuando nos lo dicen, no porque la ocasión nos provoque la sonrisa, abrazamos cuando saludamos no cuando nos hace falta sentir el calor humano. Nos cuesta saber porque luchamos, para que luchamos, en que ha de convertirse esto tan bonito y maravilloso que llamamos vida.

Y quizás es hora de parar el carro, de poner los caballos a pastar y beber aguas cristalinas, mientras nosotros y nosotras bajo un árbol cerramos los ojos e iniciamos un viaje al cielo. No cabe pensar en la idea de que uno quiere morirse, sino todo lo contrario, necesitamos poner orden en la vida, en el planeta, en nuestro trocito de universo, en el de todos los días, y para ello necesitamos las referencias de la gente que ya ha vivido, o que ya vivió todo eso, hasta la experiencia de morir, porque de los presentes ya lo hemos escuchado todo y no nos han convencido.

El cielo, estará donde vayas tu cuando cierres los ojos y te encontraras frente a frente, a quien quieras consultar, y en ese espacio que será solo tuyo, que ni el más potente de los ordenadores podrá reconstruir, ni el más honorable de los políticos podrá legislar, ni el más loco de los poetas podrá versear, ese momento, ese espacio es tuyo, frente a frente, preguntando y respondiendo, sonriendo y a veces hasta llorando.

En este mes, que hasta la Macarena se viste de negro, donde nos recuerda el mercado que hemos de cumplir con la tradición de florear a nuestros muertos. A mi sin embargo, me trae el recuerdo, de la prisa que tenemos para llegar no sabemos muy bien donde, por eso hay que parar el carro y dejar pastar a los caballos, y que nuestros muertos, los que sean, nos sirvan para completar la reflexión de lo vivido, lo aprendido, y lo proyectado.

Este VIAJE AL CIELO, solo será para descubrir que la vida hay que vivirla, sentirla, lucharla, ganarla, gozarla, pero sobre todo respetarla, sentir el aliento de los que no están y fueron nuestra referencia, pues han de seguir siéndolo, sentir la fuerza necesaria para saber que lo que nos toca por vivir es tan lindo, que al cielo solo viajo, para hablar conmigo mismo, porque para quedarme el CIELO DEBE ESPERAR.

Jose Salvador
noviembre mes de los muertos

lunes, noviembre 01, 2010

ALGO BONITO, ALGUIEN BONITO





Vaya lío que nos traemos en estos tiempos confusos en que el alma puede mas que el corazón, estamos hartos de tanta incertidumbre sobre nuestro futuro, tanta desazón en nuestro presente y habernos sentidos engañados en nuestro pasado.

Queremos reconducir la historia que nos ha tacado vivir, por lo menos, la personal, la que mas o menos podemos controlar y andamos buscando “algo bonito para vivir, con lo que vivir, por lo que vivir” y ahí está el quit de la cuestión ¿Qué queremos cuando decimos “algo bonito”?. Descifrar esta expresión es la intención de este corto artículo, y serás tú quien vaya dando pistas del acierto del mismo o no y corrigiendo o añadiendo otros matices e ideas no expresadas aquí.

Algo bonito es una casa donde vivir, que se va llenando cada día de vida, que la vas haciendo tuya, con tus olores, tus sabores, tus colores y una vez completa de formas la llenas de alma con tu vida y la vida de los tuyos, con los que compartir ese espacio vital que te has dado para protegerte no solo de las inclemencias del tiempo sino también de la soledad inmensa de los grandes espacios.

Has construido lo que en otros tiempos se ha llamba hogar y ahora lo llamamos algo bonito, algo bonito porque ha cambiado el contenido de ese hogar, ya no son la mujer o el hombre y los hijos, los que construyen ese espacio ahora pueden ser dos hombres y dos mujeres con o sin hijos, también un grupo de amigos, o unos desconocidos que comparten intimidad a cambio de ahorrar recursos económicos, que a veces ni se tienen para afrontar los gastos.

Ahora el hogar es otro espacio, ya no es o no quiere ser ese lugar secreto donde ocurrían grandes esperanzas de futuro y a la vez inmensas atrocidades, calladas la mayoría de las veces que se fueron cuando llego la hora de los mortales. Ahora el hogar es o quiere ser un espacio de libertad donde solo se vive lo que se quiere vivir, donde la tiranía del que paga o del mas fuerte ha caído como caen los regímenes dictatoriales, ahora el hogar es o quiere ser un espacio de creación, también tendrá sus miserias y sus virtudes, pero vistas desde el prisma de la libertad.

Algo bonito, es un trabajo con el que mantener nuestro estatus de vida, un trabajo donde nos sintamos realizados, creativos, en el cual nuestra aportación sea valorada y cada día podamos superar el tiempo que dedicamos a él como un tiempo no de obligatoriedad sino como un tiempo de aportación para construir una sociedad.

Un trabajo donde el esfuerzo esté recompensado con el reconocimiento y el pago justo por lo realizado, un trabajo donde la opresión del más poderoso desaparezca por la expresión de lo que se quiere y se busca, un trabajo donde los compañeros y compañeras compartimos el deseo de ser felices cada día. Un trabajo, donde la dignidad del mismo este abocada a expresar cada día la más sinceras de nuestras sonrisas. Un trabajo que nos dé para construir hogar, para construir futuro, para construir historia.

Algo bonito, alguien bonito, es ese ser que todos y todas buscamos, con dificultad la mayoría de veces, pues queremos que sea alto rubio y con los ojos azules, morena, delgada y con curvas.

Parece ser que buscamos un jarrón que nos complemente y nos decore el hogar, un cuadro suave de Monet o agresivo en la formas de Picasso, queremos un ser que nos ria cuando queremos reír y nos llore cuando no podemos más, queremos alguien a nuestro lado que nos quiera cuando estamos faltos de cariño y nos deje libertad cuando queremos espacio a nuestro alrededor.

Un ser solo para nosotros pero sin ser nosotros de él, un ser que nos alimente el corazón cada día, pero si no tenemos hambre que nos guarde la ración para mañana por si acaso, buscamos alguien que tenga todo lo que nosotros no tenemos pero que no nos lo muestre sino que nos lo regale, queremos un ser a nuestro lado que nos de eternamente la razón y confirme que somos lo mejor de lo mejor, queremos un ser a nuestro lado que sea un esclavo y eso ¿es algo bonito?

Por eso decía al principio que estamos confusos, que alguien bonito, tiene que ser por su forma de ser libre, por querernos desde la libertad, desde lo que somos y lo que es él o ella, no podemos construir algo juntos si la otra persona esta anulada.

Alguien bonito, es quien nos dice a la cara lo que nos quiere pero también nos dice lo que necesita, la que ríe cuando siente la necesidad de compartir alegría pero llora cuando destrozamos con nuestra mirada el alma, alguien bonito es quien nos pone frente al espejo y nos abraza, para que veamos quienes somos y sintamos que está ahí para compartirlo.

Alguien bonito es cuando sentimos que nos están abrazando aunque entre su cuerpo y el mío existan kilómetros de distancia, alguien bonito es quien te besa y no te pregunta, quien te abraza y te comprende, alguien bonito es quien necesita de tu amor y tu del suyo, alguien bonito construye contigo el futuro, no vive en el tuyo sino que se construye juntos, alguien bonito, es quien cada mañana te da un beso de buenos días como si fuera la primera vez que te ve.

Alguien bonito te quiere, no está contigo por estar o solo por lo que das, a alguien bonito le duele que tu trabajo no sea digno o tu hogar no sea feliz, alguien bonito es libre y como la libertad siempre estará dispuesto a marchar, y solo será el amor y el hogar lo que hará que cada día sea el comienzo de un gran final.

Alguien bonito eres tú y solo falta que nos encontremos.

Jose Salvador

1 de noviembre 2010

viernes, octubre 29, 2010

ADIOS, COMPAÑERO, ADIOS



Llegó el último viaje, que seguramente nadie deseamos, pero que siempre ha de llegar, llego para hacer un camino diferente, que desconocemos que ni tú ni nadie sabemos a ciencia cierta cual será, bueno tú hoy ya lo has descubierto, es lo último que hacemos, descubrir nuestra propia muerte.


Te has ido dejando huella, como la dejan los grandes hombres, los hombres buenos, te has ido de madrugada, esas madrugadas que tanto temías cuando luchabas desde los sótanos escondidos de las más humildes casas, camuflados en las parroquias de barrio, escondidos al son del no pasarán.

Te has ido, lento, despacio, aprovechando el tiempo, viviendo 92 años, pasito a pasito, y siempre por tu camino, el de la Libertad, la Justicia Social, y la paz. Te has ido para no volver, como esa máquina de carbón que arrastraba el tren que tu tanto conocías, hijo de guardagujas, hijo de obrero, y así fuiste toda tu vida, obrero y llevaste la dignidad de los tuyos hasta el final, pagaste por ello en las cárceles del país que te vio nacer, estuviste exiliado y allí conociste a Josefina paisana mía de Fondón en Almería, y hoy estaba ahí a tu lado, acompañando estos momentos de despedida junto a los tuyos, y a otros que no lo eran tanto.

Viviste el amor como la lucha, poco a poco, sin dejarla marchar ni un momento, sin persistir en el intento de poner un granito cada día, ello te dignifica como obrero y te engrandece como Hombre.

Gracias, porque hemos compartido momentos, huelgas, lecturas y músicas, todo ello sin llegar a conocernos en persona, yo a ti si te he visto alguna vez, pero nunca intercambiamos palabra, pero aún así se que muchas veces hemos caminado juntos.

Adiós para siempre y ojala tu memoria nunca sea borrada y tu lucha sea presentada cada vez, que como en estos tiempos, los enemigos de la justicia social, tus enemigos, quieran borrar todo aquello que con tu lucha y la de tus compañeros, con las comisiones obreras, se han conseguido.

Hasta siempre compañero, hasta siempre.

Jose Salvador

29 de octubre 2010

sábado, octubre 09, 2010

Gemidos de placer












Hace tiempo que no se oyen gemidos en los cuartos de las casas, en las habitaciones de los pisos, ahora solo oímos discusiones, parece ser que la crisis solo nos trae desgracia, nunca cambios. Queremos, quiero oír gritar de placer a mi vecina, quiero sentir vergüenza y ponerme realmente colorado al sentir gozar al tiarron del tercero b, quiero tener que mirar para abajo en el ascensor cuando coincida con los vecinos del 1º A, pues sus gemidos los tendré presentes cada vez que los vea, pero sus gemidos de placer, sus palabras obscenas que reflejan sexo puro y duro, pero sexo placentero.

Quiero dejar de mirarlos a la cara, para que intuyan que no me gustan los gritos desesperados por eternas discusiones de quienes ya no se soportan. Quiero que no sean ellos los que sientan vergüenza por haber sacado los trapos sucios a lucir por el patio de vecindad, quiero que no sean ellos los que sufran el desprecio de no ser saludados por sus obscenas palabras de falta de respeto.

Necesito quiero oír cerca los ¡ay!, los ¡me gusta lo que me haces!, los ufffffffff, los uhmmmmmm y sobre todo: ¿te ha gustado amor, que tal si repetimos pero ahora en la cocina? Quiero conocer todo el vocabulario de mi bloque para expresar deseo, placer, lujuria, quiero que salten las lámparas del techo de mi cuarto del movimiento de la cama del de arriba, quiero que la ropa interior sea renovada porque fue destrozada en la furia de la pasión, quiero que el sexo se apodere de nuestro bloque, de cada una de sus casas, sean alquiladas, compradas u ocupadas, quiero sentir, que vivo sobre, bajo y entre el placer de personas que se quieren, que se aman, que se desean, Quiero escuchar sonoros y vergonzosos gritos de placer.

Y como todo buen vecino, empezaré yo, comenzaré yo, a gritar, a traer placer, a llenar de "oxigeno" mi cuarto, a sentir como cada centímetro de mi piel es puro deseo, puro arrebato de lujuria, sentir como mis compañeros de piso se avergüenzan de mis gritos, de los gritos de mi amante, a notar como las músicas suben de tono para no sentirnos espías de los gritos placenteros del amante recién llegado.

Quiero que el rojo de la cara sea un color más natural, ¿Cuánto tiempo hace que no te sonrojas?, yo hace mucho, que no me sonrojo por el efecto de la piel, del placer, hace mucho tiempo que no noto la vergüenza de haber sido escuchado, casi saboreado, casi sentido.

Dejaros de vergüenzas en este tiempo, dejaros de tapujos, y respetando el silencio de los cuerpos que se quieren, gritar de placer, llorar de lujuria, reír de gozo, y hacer que el mundo sepa que a pesar de todo, seguimos siendo los mismos seres que antaño al ver pasar un buen culo, unas buenas piernas, o un buen paquete gritábamos, ¡Dios! ¿si existes? mándame uno, que hace tiempo que mis compañeros de piso creen que soy mudo.

Jose Salvador
Llueve en Sevilla
octubre 2010

miércoles, septiembre 29, 2010

ME SOBRAN LOS MOTIVOS


















- Porque el dinero lo robaron ellos (los bancos, las grandes empresas, las constructoras, el gran capital) y lo hemos pagado nosotros/as con nuestros impuestos.

- Porque el dinero lo robaron ellos y rebajan el sueldo a los trabajadores/as de la administración pública.

- Porque el dinero lo robaron ellos y los contratos solo tendrán 33 días de indemnización si eres despedido, es decir, se quedan con 12 días por año de nuestro trabajo.

- Porque el dinero lo robaron ellos y ahora ya no eres viejo/a para trabajar a los 65 años, sino que de golpe y por arte de magia, lo eres a los 67.

- Porque el dinero lo robaron ellos y nos amenazan con no cobrar las pensiones.

- Porque el dinero lo robaron ellos y han despedido a los que trabajaban en sus empresas por un salario.

- Porque el dinero lo robaron ellos y quiero que lo devuelvan.

Por todo eso, y mil razones más que habrás escuchado, yo voy a LA HUELGA GENERAL.

Jose Salvador

29 septiembre 2010

martes, septiembre 28, 2010

PAUSANDO LA VERDAD





Dicen que es la forma mas suave que existe para decir una mentira, es como cuando alguien feo te pregunta ¿te gusto?, tienes que pausar la verdad, y contestar aquello de “no estas mal pero no eres lo que busco”.

Lo malo de todo esto, es que nos vamos acostumbrando a pausar la verdad demasiadas veces, no solo para mentir por la fealdad de un semejante, que es cruel, sino para expresar algo tan simple como nuestro estado de ánimo.

Expresamos con dificultad los sentimientos pero nos cuesta mucho más trabajo expresarlos cuando estos van dirigidos a alguien en concreto, es ahí donde perdemos el respeto a la verdad, es en ese momento donde la pausa se convierte en silencio y el cambiar de tema se hace imprescindible, nos da pavor, terror, nos conmueve todos los cimientos de nuestro ser, pensar, saber, creer que nuestros sentimientos han dejado de pertenecernos y forman ahora parte de eso que se llama: la sin razón del querer.

Estamos inmersos permanentemente en algo difuso, vamos a más velocidad de la que nuestro corazón es capaz de bombear sangre, para que la maquinaria resista, por eso tantos infartos, y por eso tantas lágrimas derramadas, no por el temor a terminar antes de tiempo este iluso pero bello cuento, sino por dejar de contralar a la bruja y malvada protagonista del mismo.

Vamos tirando pausa tras pausa de nuestras verdades, las hacemos factibles para creernos a nosotros mismos, para no sucumbir al desánimo de creer que todo y todos son una mentira. Acotamos los tiempos y los caminos, los tiempos para querer los pausamos cada vez más, nos hacemos incrédulos del querer, y recorremos caminos sin ver el paisaje solo quemando kilómetros, siendo promiscuos del tiempo y del espacio, creyendo, sin pausa, que cuantas mas manzanas comamos más príncipes besaran nuestros labios, y que un beso nos despertará del bello sueño de no soñar, dicen que es cuando más se descansa, y volveremos a recorrer el camino acompañados y el tiempo pasará como la arena del reloj cae, lenta pero inexorablemente macabra, pues nos guste o no, caerá el último grano.

Tiramos demasiadas sonrisas al aire cuando nadie nos ve, y pausamos la verdad, cuando todos nos miran, nos avergüenza saber que estamos contentos por un trabajo bien hecho, o por un abrazo recibido, o por el estrujón de un desconocido niño con falta de cariño paternal, o peor aún sentimos demasiada vergüenza cuando estamos enamorados, y guardamos tanto en la despensa que caduca antes de poder gastarlo.

Hoy tengo que pausar la verdad, para decirte que te he olvidado, hoy tengo que pausar la verdad para decirte que ya no escucho la música que me has aconsejado, hoy tengo que pausar la verdad para decirte que el móvil lo tengo apagado.

Jose Salvador

Septiembre 2010

lunes, septiembre 20, 2010

NOS VAN DEJANDO LOS POETAS








Nos van dejando los poetas del pueblo, los que nacieron para ser cantados desde las más lúgubres tabernas hasta los más solemnes altares.

Nos va dejando poco a poco la historia que hemos ido construyendo, o al menos, hemos creído o querido construir, señal de vejez quizás, o de tiempos difíciles, no lo sé. Bueno lo de más viejos si es cierto, pero se me torna que el poeta no muere por edad sino por que el viento sopla en sentido opuesto.

Lo hemos cantado en celebraciones, en bodas, en la playa, en el camping, lo hemos cantado en la ducha y después de querernos, pero sobre todo lo hemos cantado cuando queríamos llenar el alma de razones y el corazón de sentimientos.

Nos van dejando los poetas, y no se muy bien quien o quienes los están sustituyendo, La Mala? Siete colores? O quizás hay que ir un poco más allá y es Lady Gaga?. No lo se, solo sé, que nos están dejando nuestros poetas.

Jose Salvador

En homenaje a un gran poeta

COMPAÑEROS

Compañero, compañero,
hasta aquí ya hemos llegado,
atrás dejamos la noche
con la violencia y el miedo.

Dejamos en los caminos
compañeros que no han vuelto,
que no han podido seguir
contra este brutal esfuerzo.

Qué larga ha sido la noche,
y el alba que tanto tarda:
salid al camino hermanos
que no amanece por nada,

y en nombre de los caídos,
de los que nunca llegaron,
hagamos de su esperanza
tiempos de hombres renovados.

Vamos ahora, compañeros,
a defender lo alcanzado
y a seguir hacia delante,
la lucha no ha terminado.

Defendamos os salarios,
los panizos y los ríos,
la igualdad entre los hombres,
las montañas y los trigos.

Qué larga ha sido la noche,
y el alba que tanto tarda:
Salid al camino, hermanos,
que no amanece por nada.

(Jose Antonio Labordeta)

lunes, agosto 23, 2010

GENERACIÓN












Desde que tengo uso de razón en la comprensión y la lectura, he ido observando como han puesto etiqueta a cada una de las generaciones que íbamos naciendo, los hippies, los revolucionarios, hasta una de las mas recientes la generación X, … hasta ahí más o menos todas las etiquetas intentaban reflejar el sentir y ser de toda una generación mundial, cuando se dice mundial, se refiere al primer mundo pues el resto no tiene generación para ser etiquetada fuera del hambre, la guerra, la supervivencia, las posguerras, los desastres naturales, las dictaduras, …….


Estas etiquetas como decía, hablan de cada uno de nosotros y nosotras, nos venían a marcar nuestro futuro, lo que seriamos, lo que hoy somos mejor dicho, y si te fijas con mejor o peor acierto han ido dando en el clavo, es fácil, si predispones al niño a ser malvado seguramente de mayor tendrás un asesino en potencia y podrás decir aquello de “ya lo decía yo”, pues eso nos ha pasado con las generaciones, nos dijeron que éramos hippies que valía mas el amor que la guerra, y nos volvimos pacifistas, queríamos ser fieles a lo que nos habían dicho que éramos.


Nos hablaron de la Generación X, nos convertimos en eso, en una incógnita nadie sabia donde estábamos. Empezamos a preguntarnos, quienes éramos, donde íbamos, que queríamos, etc… convertimos nuestra vida en una gran X, después llego la generación de los acomodados y las acomodadas, es decir, teníamos posibilidades, estudios, había empleo, pero nosotros seguíamos en casa de papa y mama, no queríamos arriesgar, vivíamos bien, teníamos todo lo necesario, hasta la libertad de decidir si irnos o quedarnos, nos dieron los 40 tacos viviendo con los progenitores.


Todas las etiquetas nos formaban, no eran solo formas de definirnos, sino más bien una buena formula para moldearnos, por ello, hemos sido idealistas convertidos en eXtraños que hemos acabado en la casa familiar por miedo a no cumplir nuestros sueños. Era algo, hacíamos algo, teníamos una tarea que cumplir.


Pero ahora, se ha llegado mucho más allá, se ha perdido el pudor, ya nada importa, no importa lo que se quede en el camino, no importan las miradas, ni el esfuerzo, ni siquiera la ilusión necesaria para mantener la vida presente. No existe ni el rubor necesario para callar aquello que con nostalgia, miedo o vergüenza se siente, ya no existe nada de eso, ahora se abre la boca y se dice, mejor dicho se maldice a toda una generación llamándola, la “Generación Perdida”.


Hagáis lo que hagáis, vuestros estudios, vuestros esfuerzos en las ongs, vuestro trabajo solidario, vuestra participación en la música, en las redes sociales, en el cine, en el teatro, en la lucha política, en la lucha sindical, vuestros años en la universidad, vuestra comprensión del mundo, vuestro respeto y aceptación de lo diferente, vuestra comunión con lo natural, vuestras risas, vuestros llantos, vuestras miradas. La luz del móvil en el concierto, la sentada frente a la plaza de toros, vuestros cuerpos desnudos sobre la caliente arena, vuestra ropa de payaso en hospitales, vuestra música de tambor mientras el sol se funde con el mar. Todo ello no es nada, absolutamente nada, porque sois una generación perdida, no contáis, habéis dejado de existir, ya no sois nadie y solo acabáis de nacer.


Ahora podéis saber como se siente un niño en Etiopia, una niña en China o en Irán, un republicano en Marruecos, o un amante de la igualdad en la India. Todos ellos antes de nacer ya habían sido etiquetados como mercancía de un gran supermercado, formar parte del escaparate. Primera página de los diarios, de las televisiones, del cine, o de estos y otros escritos.


¿Quién ha sido el pornográfico que ha nombrado a todos ustedes “Generación Perdida”?. Ojala, habrá que luchar por ello, esta vez la Historia no se cumpla. Ojala.

Jose Salvador

Agosto 2010

viernes, agosto 20, 2010

NOTAS MUSICALES











Nunca me gustó conducir de noche, quizás por ti lo haría pero nunca me gustó, las estrellas me entretienen el camino, son como notas musicales que se ponen a sonar y hacen bailar a la carretera por la que ando, y así, no puedo conducir, las curvas son como notas musicales, 1 redonda, y el coche empieza a tomar una curva, que podía haber sido perfectamente la curva de tu cuerpo, esa que se dibuja donde empieza la cola de tu caballo con alas, quien pudiera tomarla y deslizarse por ella como si fuera un tobogán, el del pecado, el de la lujuria.


Siguen las estrellas haciendo bailar mi camino, 2 blancas y 4 negras, notas que reflejan lo que hemos vivido hasta ahora, mucha luz, demasiada luz quizás y nos cegó o me cegó no lo se muy bien, y claro para apagar tanto deslumbramiento, como cuando vas conduciendo y alguien te pone las largas que te ciega, pues igual nos paso y tuvimos que echarle un poco de negro, notas musicales oscuras que me hicieran ir un poquito mas lento, pero como toda música al ser elaborada, al principio puede ser que suene mal, que el oído no este acostumbrado y tengamos que escucharla varias veces para ir tomándole el sabor, el mensaje de lo que nos quiere decir.


8 corcheas, dibujan las estrellas que se han posado sobre la botella que cubre la belleza que escondes entre tus piernas, 8 luces en el firmamento que dibujan la sonrisa que sueltas cuando te digo a la cara que te voy a comer la boca, cuando me sueltas “Mi arma”, 8 escalofríos como cuando escuchas la mejor de las notas musicales susurrar al oído, noto al mirar cada rincón de tu foto, que no es otra cosa que cada rincón de tu cuerpo, y que reflejan el deseo que te tengo, las ganas de hacer algo juntos, mucho más allá de unas viejas sabanas que nos cubran, o de un viejo sofá que nos abrace mientras derrochamos pasión, ganas y deseo.


16 Semicorcheas y ya tenemos todas las notas puestas, tus fotos sobre mi cama dibujan un puzzle, tu sonrisa sobre la pantalla dibuja un firmamento, mi amor sobre tu cuerpo dibuja un me gustas, un te quiero, ya no quedan notas musicales para seguir escuchando esta canción, o comenzamos una nueva partitura o esta que ya esta agotada nos fastidiara lo que nos habíamos propuesto. Conocernos.


Levanta un poco la cara, deja que tu sonrisa vuelva a dibujar un nuevo cielo, ríe a carcajadas y deja que tu risa inunde mis oídos a través de este maldito teléfono, pero sobre todo, siente, siente fuerte, porque si los dos sentimos al unísono, estoy seguro que volveremos a encontrar nuestra canción. ¡Mírame! yo ya estoy bailando, ahora solo me falta tu risa, ¡mi arma!.


Nunca me ha gustado conducir de noche, pero mi amor, por ti, por ti lo haría.


Jose Salvador

Agosto y calor

miércoles, agosto 18, 2010

ME PUSE A PINTAR














Me puse a pintar las paredes de mi habitación de blanco, para darle más luz al cuarto, y dicen que también así parece más limpio, el techo lo he pintado de azul, para ver el cielo mientras duermo, en realidad no he pintado nada por pintar, sino porque tenia que hacer algo, pasar el rato, ocuparme en algo diferente a lo que vulgarmente me ocupo.



He pintado todos los filos del cuarto, lo más entretenido lo que llaman recortes, eso que hacemos también con las personas, que las vamos seleccionando, recortando, esta para la marcha, esta para el café, a esta le cuento mis secretos y a esta la querré, somos así, nos pasamos la vida recortando.

He pintado una cenefa en una de las esquinas, creo que no se llama cenefa, sino “motivo”, en realidad es como un Tatoo, he querido que sea mi toque personal, como mi huella, ahora cada vez que veas una foto sabrás que es mi habitación, como a las personas, que tienen un tatuaje específico, algo personal no de catalogo, las conoces de momento, un tatoo dice mucho de quien lo lleva, o quizás de donde lo lleva, o tal vez de porqué lo lleva.

Como me ha sobrado pintura me puse a pintarme yo, empecé por darme un retoque en los pensamientos, elegí un color pastel para suavizarlos, tengo últimamente tendencia a pensar mal, y eso a parte de no gustarme me hace sentir triste, así que le di una mano de pintura y como nuevo, a pensar que lo pensado no tenia porque haberse pensado.

El color fuerte lo deje para las ideas, necesito renovar, estoy casi seco, agotado diríase, con falta de creatividad, me cuesta ponerme a escribir algo inteligente, creativo, que llegue, algo que vaya mas allá del folio que emborrono, necesito un empujón de optimismo, el mismo que me daban tus ojos cuando me decías que bailara, o la picaresca de tu frase cuando me decías lo que me iba a pasar el día que estuvieras cerca, eran momentos como el color, fuertes, creativos, llenos de imaginación.

Se que me han sobrado colores, que necesito pintar una nueva sonrisa que la usada ya no es para nadie, te la ofrecí y cuando la has tirado no soy capaz de volver a pintarla, ya no sirve. También tengo el color del corazón ese que hace latir mas fuerte cuando se abre la ventana y sabes que detrás de ella estas tú, odio ese color, le tengo demasiado coraje cada vez que lo uso se me estropea, se corta, y estoy seguro que es culpa mía que no hago bien las mezclas, que echo demasiado disolvente y claro, el color ya no es lo que era, y por lo tanto asusta verlo.

La mirada necesita una mano también, un poco de rimel para hacerla mas intensa, pero sobre todo lo que necesita es color, se ha quedado un poco triste, no es muy racional seguro, porque no había de haber motivo o quizás si, pero que color le pongo, verde, diríase que refleja esperanza y la verdad no se si existe, marrón demasiado oscuro costará luego avivarlo cuando llegue el momento, quizás los pinte de miel porque tiene el color apagado del momento pero la dulzura que refleja que esto será solo pasajero, un mal momento.

Tengo todos los colores esturreados por el cuarto, manchado hasta el último ricón, vaya estampa, yo desnudo revolcado sobre ellos y tú mirando para otro lado, ya no te importa si bailo sobre el verde, o si mi ropa cae sobre rojo pasión, ni siquiera te importa que me envuelva en el marrón. ¿Ya no te gustan los colores? Dímelo para volver a echar disolvente porque tanto color sin usar duele, digo que si duele.

Jose Salvador

Noche de agosto

Después del gym.

lunes, agosto 16, 2010

DICCIONARIO









He de comprarme un diccionario, pues las palabras que pronuncio o que escribo no siempre parece que tienen el mismo significado, lo iré regalando por ahí, a propios y a extraños, y no llegar a equívocos que dificulten la larga o quizás corta travesía que estamos pasando, a la vez, te pediré a ti el tuyo, para saber cada palabra el significado que le estas dando, cada acento o cada pronunciación a la parte del alma que pertenece, porque tú mejor que nadie sabes que hay palabras que se escriben con el corazón, otras con el alma, muchas de ellas las escribimos con la rabia, y otras las menos nos salen de los sentimientos.

Escribimos y herimos, escribimos y amamos, escribimos y odiamos, todo con el mismo abecedario con el mismo idioma pero con diferentes significados, por eso mi primer regalo un diccionario, el segundo mis palabras, que también quiero que sean un regalo.


Cuando digo me gustas, me refiero a todo lo tuyo, no solo a tu cuerpo, también a tu risa, y a tu forma de enfadarte, a tu manera de soplar cuando algo no sale bien y como no a tus andares diferentes según el lugar al que te dirijas. Cuando digo me gustas, no me refiero solo a la necesidad carnal de tenerte entre mis brazos, entre mis sabanas o debajo del agua que me está duchando, cuando digo me gustas me refiero también a la forma que tienes de mirar cuando no miras, o de hablar cuando estas callado, cuando digo me gustas, no lo digo porque me da la gana, lo digo porque mi boca se abre a la fuerza, mi corazón se acelera y mi cerebro envía la orden a mis cuerdas vocales para que formen la palabra ¡Me gustas! Y no lo digo por las prisas de tener algo contigo que lo tengo, lo digo porque así lo dice mi diccionario, me gustas: Díselo antes que otro se lo cante.

Cuando digo te quiero, es que ya gaste un millón de vocablos en decirte me gustas, te quiero es como el agua del mar, rabioso y calmo, es espumoso y lacio, es valiente y excesivamente conservador, como las olas, que siempre están llegando a la orilla y a veces se convierten en tsunami que lo arrasan y destruyen todo, el mismo mar, la misma ola, así es el te quiero, a veces apacigua otras destruye el corazón porque no tiene eco, no tiene respuesta, y un Te quiero, o va seguido de una respuesta o destrozará la garganta al ser pronunciado.


Un te quiero, es algo más que un compromiso, es una sensación, a veces un escalofrío dirían los poetas, otras veces una navaja afilada que brilla a la luz de cualquier luna, pero casi siempre son unas lagrimas que hay que recoger. Te quiero se dice siempre después de haber gastado un millón de vocablos en decir Me gustas.


Quiero compartir mi vida, es tan complicada la frase, el verbo que se utiliza, el sujeto y hasta el objeto, y como no el predicado, ¿compartir la vida? ¿Qué vida? La vivida, la que nos queda por vivir, la que todo el mundo conoce, o la que llevamos dentro, la que soñamos que viviremos, la que estamos construyendo, o la que nos hemos encontrado. Son tantas vidas, que veces se nos olvida y solo compartimos una y cuando llega la otra salimos corriendo, pues es extraña, desconocida, diríase que no nos pertenece, que esa no era la vida. Quiero compartir mi vida tiene que llegar después del millón de de vocablos de Me gustas, y un millón después de Te quiero, solo así sabremos que vida nos pertenece para compartirla.


Y por último, compartir las lágrimas, que saldrán de mis ojos, de tus ojos, amargas como el tuétano, tristes como la primavera cuando deja de brotar, salvajes como el invierno de Siberia, odiosas como la madrastra de cenicienta, pero que llegarán y de forma abundante, porque la vida se nutre de ellas, cuando se nos van trocitos que la forman, y ahí, o tienes ya mi diccionario y yo tengo el tuyo, o nos ahogarán, y será como la estúpida y fracasada historia de Alicia en el país de las Maravillas. Las lagrimas llegaran y espero que cuando lleguen nos pillen abrazados formando una gran fuerza porque sino, será como la ola que en la orilla arrastra a la vieja que aunque es sabia ya no le quedan fuerzas.

No me preguntes el porqué

Pero necesitaba escribirlo.

Jose Salvador

16/08/2010

domingo, agosto 08, 2010

LOS TOROS













Me gustaría escribir sobre lo absurdo del tema toros, pero soy tan profano en la materia que no debiera hacerlo, se ha llegado a decir que peligraba la identidad de España como país, como nación. Se ha dicho también por el otro lado, que los asesinos no tienen cabida en este “moderno” país, que los y las jóvenes ya no apoyan estas barbaries, ¿Se han fijado quienes son los protagonistas de tirar una cabra del campanario, o matar un toro a pedradas, o lanzarlo al agua, o ponerle fuego en los cuernos?, en fin, como estaba diciendo, se han dicho demasiadas tonterías por un y otro bando.


Que no me gustan los toros lo saben hasta las vacas, pero de ahí a convertir en una cuestión de nación, de identidad, o de edad, el debate me parece como minino una falta de argumentos, donde queda en el debate: los costes económicos de la fiesta, el tipo de público que la sustenta, las subvenciones que recibe, la riqueza que genera, la lucha frente a la naturaleza de un animal bravo, el sufrimiento de la muerte a son de corneta, …….. porque no circunscribimos el debate a lo que es una corrida de toros, quizás sea más fácil ponernos de acuerdo, que no significa estar de acuerdo.


Que seguramente la llamada “fiesta nacional” ha tocado a su fin, es muy probable, que como toda revolución cultural y de pensamiento tendrá sus altos y bajos, también es probable, pero ha tocado techo, no se puede sostener que para divertirnos lo hagamos a costa del sufrimiento de un animal, por mucho que nos guste, por mucho que la estética del hombre frente a un bicho de 600 kg sea inigualable en otro campo, por mucha historia que arrastre, cine, canciones, coplas, poetas, pintores, etc…. Los toros, ya no tienen su sitio, se lo ha quitado la responsabilidad de una sociedad que quiere cambiar en ética, aunque luego mate a sus mujeres, abandone en asilos baratos a sus ancianos o expulse a los llegados de fuera porque ya no los necesita para los malos trabajos.


El debate esta en la calle, eso dicen por lo menos, aunque mi pescadero solo me habla de lo mal que le va con la crisis, no de toros, claro el no vende carne será por eso, y mira que esta rico un buen rabo, de toro hombre de toro.

Jose Salvador

Agosto 10

jueves, agosto 05, 2010

Mi intimidad














Mi habitación huele a sal
a olas cuando rompen contra el mar
a espacio abierto, a Libertad.

Mi habitación huele a paz
al aroma del sexo
al placer del amor
al tiempo, al sudor de no estar.

Mi habitación huele a ti
y lo raro es que nunca has estado
pero huele a ti
a tu cuerpo
a tu piel
al espacio que hay entre mis labios y tu sonrisa.

Mi habitación huele a lejos
a caras de madrugada
a noches difíciles de dormir
a tu recuerdo en mi mente
a tu cuerpo en mi recuerdo

Mi habitación huele a tu espacio.

Y ya no quiero que huela más
lo que quiero es que sepa
que sepa a ti
a tus besos
a tus caricias
A tu forma de entrar.

Mi habitación ha dejado de ser mía
Ahora es la habitación
Aun no compartida.
Mi intimidad
Ya no es mía
Es del mar
Donde tu estas.



De jose

domingo, julio 11, 2010

ROJA, AMARILLO GUALDA Y ROJA









Roja, amarillo gualda y roja, esos son los colores de la bandera de España, colores que puestos en ese orden, no hace ni dos telediarios eran representativos de lo facha, lo arcaico, lo atrasado, el pasado.


Estaba ahí porque tenía que estar pero los bien pensantes, la mayoría de la población no era devota de esos colores, de esa bandera, preferían mil veces antes los colores de las banderas de su autonomía o localidad, parece, sin conocer la historia, que estuviesen mas limpias de cuerpo y alma.

Pero como todo en este país se transforma sin que casi nos demos cuenta. Éramos emigrantes, tenemos tíos en Alemania, Francia, Holanda, Venezuela, que nos han traído siempre regalos de aquellos que aquí no existían, y sin darnos cuentas, comenzaron a llegar, de Rumania, de Hungría, de Educador, Colombia, Venezuela, Marruecos, Senegal, …. De decenas de países, y convirtieron nuestras ciudades en muestras de cultura diferente, la tienda de 20 duros, paso a ser la del marroquí o el chino, la carnicería del barrio es musulmana no vende carne de cerdo, y la novia de mi primo, no el que nació en Francia sino el de aquí, es colombiana.

Todo esto ha ido pasando sin darnos cuenta, y nos hacíamos ricos, o creíamos que éramos ricos, y comenzamos a viajar por otros países, y a tener aspiraciones de buenas casas, buenos coches, …. Queríamos tener un ordenador cada uno, una habitación sin compartir con el hermano, ir a escuelas de pago si eran mejores, y ponernos en los dientes ese horroroso aparato metálico que los deja niquen forever.

Pero como todo sueño, de golpe sin saber porque ni quien hizo que así ocurriera nos echaron un jarro de agua fría, fría no, helada mejor dicho, y empezamos a temblar, por nuestro piso, nuestro coche, nuestro trabajo, nuestros derechos, nuestros sueños, nuestras ilusiones, y ya lo intercultural nos parecía invasión, la novia de mi primo ya no es Colombia es la que ha venio a currar a España con lo mala que esta la cosa aquí pa “los nuestros”. Y en todo este desbarajuste, en todo este desaguisado, en todo este cenizo, maldito el cabrón que lo creo, digo en todo este desasosiego que casi no nos dejaba respirar, llegó ESPAÑA, LA ROJA, y todo volvió a ser de color, todos celebrábamos al unísono los triunfos, como si el partido lo jugáramos desde casa en vez a miles de kilómetros.

Aquel trozo de tela denostado (rojo, amarillo gualda y rojo) volvió a ser nuestra bandera, lucia en balcones, ventanas, coches, niños con banderolas, camisetas y los mas osados hasta en los huevos pues sus slips eran de ESPAÑA.

Otra vez, de nuevo, algo nos hacia soñar, quizás era un poco de pan y circo, ¿pero lo necesitábamos?, demasiada agua fría estaba cayendo sobre nuestras espaldas, ya se que si ganamos o perdemos a la mañana siguiente seguirá la economía igual que hoy, pero ¿y la población? Espero que con mas conciencia de pensar que si todos a una, defendemos una historia, esta no le queda más remedio que cumplirse.

Mi amigo Luis en su articulo en TRES W ondeando.org dice que ahora tocaría gritar VIVA ESPAÑA, pero el pasado sigue siendo demasiado pesado para saltárselo por un partido de futbol, así que engañemos al corazón y gritemos VIVA LA ROJA.

Por cierto, ¿Quién ha ganado?

11 de julio de 2010 a las 19:07 horas

Jose Salvador