Y ahora qué?

Bueno y ahora que?

Como vamos a pensar tan rápido como ustedes, si nosotros tenemos los ojos llenos de lágrimas, como vamos a ser coherentes si nos duele el corazón por esta infame patraña, cómo vamos a saber que hacer si aún nos duelen los odios del ruido expandido, cómo vamos a mirar al cielo si el humo gris nos ciega nuestros ojos.

Todas estas preguntas me las hago a cada momento, cada vez que una esperanza se rompe, y esta, la de acabar con el terrorismo se ha resquebrajado, no se si rota, pero si bastante ajada, y lo peor, lo peor de todo, es que , se ha ido una esperanza llevándose por delante a dos vidas, a dos seres de otras tierras que buscaban libertad.

Y creyendo haberla encontrado, mal presagio del destino junto a unos cabrones asesinos, que utilizan bombas para negociar, creyendo que por avisar, una bomba ya no explota o deja de matar, y esta ha matado, ha asesinado, ha cerrado los ojos de ellos dos, nos ha llenado de lágrimas a todos, menos a los del Partido Popular, y menos a los de la AVT y menos a los de la COPE, y menos a los de HB y menos a los de ETA, y menos a los Inestriyas, Tejeros y Blas Piñar, todos ellos han tenido los ojos secos, no han podido o no han querido llorar.

Unos, por estrategia política porque quieren ganar, a cualquier precio, quieren gobernar. Otros porque sus medios de comunicación se alimentan del odio, del mal pensar, del placer de saber que al otro todo le va mal.

Otros porque quieren ser las eternas victimas y que nadie absolutamente nadie ponga en duda su capacidad de convocar, o de ser los portavoces o de recibir las subvenciones o de sentarse con el gobierno a negociar prebendas.

Los otros los que han puesto la bomba física o intelectualmente, esos como van a llorar si llevan años matando y ni una sola lágrima se les ha visto soltar. Y los otros los últimos, porque quieren desestabilizar, crear confusión, son aquellos de la España oscura, son los que defienden a asesinos como Franco o Pinochet, esos como van a llorar si sin poner bombas solo saben aplaudir a los que matan por matar.

Pero, aún, después de todo esto ¿qué hacer?, el problema se me va de las manos, se me escurre como al niño que quiere coger el agua del mar para jugar. Sigo con lágrimas que no me dejan pensar, con la mirada llena de gris barro, de gris metal, los oídos taponados de tanto ruido, de tanto gritar, y sin embargo sigo pensando que callados no podemos estar, que algo tenemos que hacer. Y no me contéis mas chistes, ni me digáis de volver a lo que nada ha solucionado. Os imagináis una política de empleo, o de vivienda, o de inmigración, o de ……. Que durante décadas no de buenos resultados y se quiera mantener sin hacer nada, sin rectificar.

No me vendáis mas milongas, ni queráis hacerme callar, quiero la Paz para mi pueblo, pero la Paz con libertad, y voy a seguir gritando y creyendo en mi capacidad de negociar. Cuántas veces he negociado y me han engañado, y por eso nunca deje de negociar, así lo aprendí de la gente que estuvo y está a mi lado, me decían siempre y aún me siguen diciendo, Jose tú escucha tú aprende y luego da tú opinión, trabaja en equipo y sobre todo negocia que ni tú seguramente ni el otro (por duro que te parezca) llevareis toda la razón.

Algo tendremos que hacer, con lágrimas en los ojos, con la mirada llena de gris, con los oídos taponados, con los amigos y amigas enfadados. Algo tendremos que hacer.

Y antes de seguir hablando no te creas que lo de la familia pobre de Ecuador, es una excepción. Que va, por eso se vienen, porque allí el hambre les puede más que la necesidad de estar en el hogar junto a los que les quieren. Y eso, españolito, españolita, apréndetelo, que el que viene no viene de turismo, así que ábrete un poquito y quiérelos.

Besos para todos y todas los que han soltado lágrimas estos días, y aquellos que no han podido llorar, los compadezco, bastante tienen ya, con notar como esas lágrimas no gastadas en ácido de mala leche para sus adentros se les convertirá

Jose Salvador.