Este mundo está cabrón y yo quiero ponerle los cuernos, quiero engañarle con otro, con la Luna o con Marte, pero engañarle.
No se puede dejar morir a un hijo en los brazos de su madre y que esa muerte sea de hambre.
No se puede pedir que se vista de blanco hasta la cabeza, con velo y tapada la cara, jurar ante Dios amor eterno y al llegar a casa y matarla “porque era mía”.
No se puede ser tan cabrón mundo, y encima pedirme que no te ponga los cuernos.
Es difícil sobrevivir ante tanta miseria y tantos gobernantes miserables.
No se puede utilizar la religión como arma arrojadiza para aplastar a un pueblo, para maltratar y asesinar a la mujer y para desarropar nuestros cuerpos de libertades.
No se puede, en nombre de Dios o de Alá o Jnum (Khnum), atormentar las conciencias, maldecid la libertad, prohibir la pasión, o como hacéis cada día enjaular el alma.
Este mundo esta cabrón, y me duele, y me duele tanto que me sangran los ojos al mirarlo, me duele que además a ti no te duela, y me duele más que el dolor del abandono.
Y se lo que me digo, porque muchas veces, más de las que somos capaces de recordar, nos sentimos abandonados, por la suerte, por el amor, por la salud, por la alegría, por ti, por todos, y ese abandono, sea cual sea, duele y mucho que duele, duele tanto como el cabrón de este mundo.
Pero también río, y me río, y hago reír, y juego y me juego y hago jugar, porque este mundo necesita que le pongas los cuernos, que si te da no lo cojas, no cojas todo el terreno para edificar, no cojas todo el agua para gastar, ni toda la energía para consumir, se cabrón tu también, y no le cojas ni la mitad de lo que te da, que rabie, y que lo guarde, y que engañe a otros, dentro de miles de años, que otros se sientan engañados, creyendo que todo absolutamente, todo le era regalado.
Este mundo esta cabrón y a mi me gusta ponerle los cuernos, ¿te apuntas?.
Jose Salvador
No hay comentarios:
Publicar un comentario